Tal y como la RAE especifica, tasar una vivienda no es más que graduar su valor o precio. En estos casos, es un arquitecto o técnico capacitado, independiente y adscrito a sociedades de tasación homologadas quien realiza la tasación que, a su vez, es supervisada y aprobada por el Banco de España.
En el caso de quienes estén en proceso de venta de un inmueble, que es el caso que estamos tratando hoy, pueden requerir los servicios de un tasador independiente para poder fijar un precio de venta de partida. El handicap que nos podemos encontrar, es que la gran parte de las valoraciones están algo condicionadas por la necesidad de financiación que necesite el comprador. Actualmente, todo es mucho más transparente y controlado que en los años del boom, afortunadamente, pero no está exento de cierto grado ajuste. Esto implica que los precios comparativos son más elevados que los precios de cierre entre comprador y vendedor.
Las tasaciones solicitadas por un vendedor, para conocer la valoración de mercado, utiliza diversos testigos comparativos, entre ellos diversos portales inmobiliarios expuestos en internet. Nuestra experiencia, y los datos que nos aportan desde Noteges Consulting, consultora especializada en el sector inmobiliario, nos indican que los precios de anuncio no son los precios de cierre. En el ejercicio 2018, de las 6063 viviendas vendidas por los asociados de la consultora en todo el territorio nacional, el ajuste medio que se produjo entre el precio venta en anuncio y el precio venta de cierre fue de 51.958€, casí un 30%. Estas cifras no están en manos de tasadores, ni de notarios, ni de los bancos, únicamente se encuentran el los big data de las consultoras inmobiliarias de escala nacional.
En el caso de los compradores, los servicios de tasación suelen ser necesarios a la hora de formalizar una hipoteca, ya que los bancos exigirán este documento en el momento de la firma, siempre que la tasadora sea homologada en su circuito interno de evaluación de riesgo.
Sea por el motivo que sea, asesorarte por un profesional puede ser una solución rápida y efectiva que puede suponer un ahorro, no sólo de tiempo, sino también de dinero pero no únicamente, con la tasación puesto que el tasador desconoce los precios de cierre de venta y el tiempo que los inmuebles están ofertados en el mercado hasta poder encontrar un comprador final.
Existen varios factores que determinarán el precio de una vivienda, pero desde INTIAA creemos que la ubicación, la distribución, la orientación, el estado y la antigüedad de la vivienda, los metros cuadrados y los valores añadidos son los elementos clave a la hora de fijar el valor de un inmueble.
Así pues, desde INTIAA te recomendamos que cuando te dispongas a fijar el precio de tu vivienda no pienses que la única solución es acudir a un tasador oficial, hay más información imprescindible para un vendedor que debe conocer para optimizar al máximo la venta de su propiedad, tanto en tiempo como en dinero. Como te hemos indicado a lo largo de este artículo, inciden muchos otros factores que harán decantar la balanza hacia un lado u otro. Así que nosotros lo tenemos claro, asesórate no solo con un tasador si no también con consultor inmobiliario. Sin duda, es la mejor opción para ajustarte a la demanda y el mercado. ¿Preparado para vender?